Zürcher Nachrichten - "Es la única forma de tener un poco de paz": el caso Venezuela en la CPI

EUR -
AED 3.87294
AFN 70.649379
ALL 98.174669
AMD 409.39551
ANG 1.90167
AOA 961.670233
ARS 1051.538092
AUD 1.63179
AWG 1.89276
AZN 1.796773
BAM 1.95105
BBD 2.130513
BDT 126.092983
BGN 1.95888
BHD 0.397421
BIF 3056.359701
BMD 1.054463
BND 1.414569
BOB 7.291316
BRL 6.112667
BSD 1.055131
BTN 88.652286
BWP 14.425014
BYN 3.453125
BYR 20667.465977
BZD 2.126941
CAD 1.486951
CDF 3021.035587
CHF 0.936297
CLF 0.037463
CLP 1033.721689
CNY 7.626405
CNH 7.630566
COP 4680.843616
CRC 536.997588
CUC 1.054463
CUP 27.943258
CVE 110.560814
CZK 25.271148
DJF 187.399499
DKK 7.463596
DOP 63.693633
DZD 140.617896
EGP 51.981689
ERN 15.816938
ETB 128.644808
FJD 2.399904
FKP 0.832305
GBP 0.835681
GEL 2.883997
GGP 0.832305
GHS 16.819089
GIP 0.832305
GMD 74.867216
GNF 9100.01218
GTQ 8.149158
GYD 220.654833
HKD 8.209571
HNL 26.493414
HRK 7.521754
HTG 138.712258
HUF 408.291939
IDR 16764.161957
ILS 3.953817
IMP 0.832305
INR 89.078624
IQD 1381.873172
IRR 44384.968904
ISK 145.147177
JEP 0.832305
JMD 167.571989
JOD 0.747724
JPY 162.740519
KES 136.556909
KGS 91.215016
KHR 4270.573696
KMF 491.985906
KPW 949.015895
KRW 1471.950676
KWD 0.32429
KYD 0.879367
KZT 524.368219
LAK 23148.616725
LBP 94427.121708
LKR 308.259437
LRD 194.021476
LSL 19.21271
LTL 3.113554
LVL 0.637834
LYD 5.140546
MAD 10.558865
MDL 19.1725
MGA 4919.068161
MKD 61.460354
MMK 3424.85323
MNT 3583.063688
MOP 8.460979
MRU 42.136723
MUR 49.781576
MVR 16.291845
MWK 1830.54735
MXN 21.452939
MYR 4.713979
MZN 67.384089
NAD 19.212705
NGN 1756.545202
NIO 38.767356
NOK 11.693045
NPR 141.843977
NZD 1.823932
OMR 0.405967
PAB 1.055141
PEN 4.010162
PGK 4.238676
PHP 61.930171
PKR 292.828153
PLN 4.319942
PYG 8232.954054
QAR 3.83888
RON 4.980969
RSD 117.137122
RUB 105.311966
RWF 1443.559231
SAR 3.960598
SBD 8.847383
SCR 14.594154
SDG 634.2631
SEK 11.576738
SGD 1.416991
SHP 0.832305
SLE 23.83472
SLL 22111.557433
SOS 602.629209
SRD 37.238876
STD 21825.245831
SVC 9.23252
SYP 2649.368641
SZL 19.212697
THB 36.739624
TJS 11.248119
TMT 3.701164
TND 3.32947
TOP 2.469661
TRY 36.306626
TTD 7.164623
TWD 34.245573
TZS 2804.870736
UAH 43.584193
UGX 3872.5709
USD 1.054463
UYU 45.280179
UZS 13534.02718
VES 48.222799
VND 26772.804141
VUV 125.187913
WST 2.943628
XAF 654.357537
XAG 0.034867
XAU 0.000412
XCD 2.849738
XDR 0.794872
XOF 653.243341
XPF 119.331742
YER 263.483869
ZAR 18.035079
ZMK 9491.432086
ZMW 28.969738
ZWL 339.536511
"Es la única forma de tener un poco de paz": el caso Venezuela en la CPI
"Es la única forma de tener un poco de paz": el caso Venezuela en la CPI / Foto: Miguel ZAMBRANO - AFP

"Es la única forma de tener un poco de paz": el caso Venezuela en la CPI

Muertes en protestas, tortura, ejecuciones extrajudiciales...

Tamaño del texto:

La investigación en la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de lesa humanidad en Venezuela atraviesa un momento crucial: el fiscal Karim Khan alega que existe una "base razonable" para creer que hubo violaciones "sistemáticas" de derechos humanos. El 20 de abril vence el lapso para analizar testimonios en La Haya.

El gobierno del presidente Nicolás Maduro acusa a Khan de tener una "visión claramente prejuiciada" y el sistema de justicia asegura que responde ante excesos de las fuerzas del orden. El fiscal general venezolano, Tarek William Saab, sostiene que su despacho ha hecho desde 2017 unas 1.500 imputaciones por abusos contra los derechos humanos.

Sin embargo, familiares de víctimas entrevistados por la AFP ven en la justicia internacional "la única forma de tener un poco de paz".

- "Mamá, protestar no es un delito" -

El universitario Juan Pablo Pernalete murió el 26 de abril de 2017 en Caracas, golpeado en el pecho por una bomba lacrimógena que disparó un militar durante manifestaciones contra Maduro que dejaron más de 100 fallecidos, origen de la investigación de la CPI. Tenía 20 años.

"Juan Pablo siempre salía a manifestar (...). Yo le decía: 'Juan Pablo, tengo miedo, están asesinando a muchachos'. Él me decía: 'Mamá, protestar no es un delito'", relata a la AFP Elvira de Pernalete en su casa, entre balones y medallas de su hijo, que jugaba baloncesto.

Se enteró de su muerte en el centro de salud adonde había sido trasladado. "Yo me volví loca. Empecé a tirar cosas, empecé a correr (...), hasta que conseguí (el cubículo) donde estaba mi hijo (...). Le decía: '¡párate, Juan, párate de allí!'", cuenta.

Altos funcionarios aseveraron entonces que el joven murió a manos de otros manifestantes por una pistola de perno, un arma para matar ganado.

"Ya habían asesinado a Juan Pablo, ahora querían también asesinar su memoria", dice su madre.

El Estado finalmente reconoció en 2021 que el deceso se debió a una bomba lacrimógena y 13 militares fueron imputados por homicidio pero con intención de dañar, no de matar, sin fijar responsabilidad individual.

Hoy, dice Elvira, 11 están libres y otros dos, prófugos.

"Quince veces fue cambiado el fiscal y cada fiscal nos decía que debía comenzar la causa de nuevo", narra.

La audiencia preliminar fue diferida 10 veces, por lo que Elvira y su esposo presentaron una acusación particular, desestimada en 2022.

"Ese día vimos al asesino de nuestro hijo, muy doloroso (...), tuvimos la fortaleza de estar allí".

La familia apeló, sin respuestas. "Necesitamos que la investigación continúe en los organismos internacionales (...), es la única forma de que nosotros podamos tener, en algún momento, un poco de paz".

- "Indicios de tortura" -

El concejal opositor Fernando Albán murió a los 56 años, tres días después de su arresto en 2018, acusado de estar detrás de un atentado con drones cargados de explosivos contra Maduro.

La versión oficial apunta a un "suicidio". Según las autoridades el dirigente se tiró por una ventana del piso 10 del edificio del servicio de inteligencia (SEBIN), en Caracas, tras pedir permiso para ir al baño.

Familiares y activistas sostienen que fue lanzado al vacío para borrar evidencias de torturas.

"Le violaron todos sus derechos: fue objeto de detención arbitraria (...), desaparición forzada (...), tortura y muerte en custodia", cuenta su viuda, Meudy Osío, en Nueva York, donde vive con sus dos hijos.

Su cuerpo "tenía moretones, fisuras, rasguños (...). Lo que me comentan los abogados es que hay indicios de tortura", dice.

"Acusaron a dos custodios (del SEBIN) algo así como de incumplimiento del deber de custodia; un delito administrativo (...), como para salir del paso", pero cuando la CPI inició sus investigaciones, "cambiaron el delito de estas dos personas por homicidio culposo", expresa.

Estos funcionarios fueron condenados en 2021 a cinco años y diez meses de prisión por "homicidio culposo" y otros delitos, pero quedaron libres tras apelar, dice Meudy.

Albán estuvo en Nueva York el 1 de octubre, celebrando su cumpleaños junto a su familia y regresó a Venezuela el 5, el día de su detención, de acuerdo con su viuda.

"Nunca pudimos recuperar las fotos que hizo (con su teléfono) durante su cumpleaños. Se quedaron con el teléfono, con el dinero que tenía".

- "A quemarropa" -

Anrry Chinchilla murió el 26 de abril de 2019 en un barrio popular de Caracas, durante un operativo contra la delincuencia de las FAES, fuerza policial disuelta tras centenares de denuncias de ejecuciones extrajudiciales. Tenía 30 años.

En el apartamento de sus padres, imágenes religiosas rodean su foto. "Te amo, papá", dice un colorido cartel que hizo su hija de 10 años.

Gregorio, padre de Anrry, cuenta que la hermana del joven vio el crimen desde una ventana.

"Lo sacan del cuarto, lo conminan a ir al pasillo, a arrodillarse (...) y ponen una sábana en el tendedero de ropa que está ahí para evitar que los que pudiesen ver desde algún lado viesen (...) y fue cuando ella manifiesta que escuchó los últimos tres tiros", cuenta Gregorio.

Dice que un policía reconoció ante un vecino que fue un "error" buscar a Anrry. "No tenía antecedentes penales".

En la calle "hubo un teatro (...), decían: 'entrégate, entrégate, suelta el arma'", denuncia. "Simulan un enfrentamiento y lo que hacen es arrodillarlo y ejecutarlo".

"No me permitieron tocarlo (...), tenía tres disparos a quemarropa (...), todos en el tórax".

Cuando la familia denunció ante la policía científica una "ejecución extrajudicial", dice Gregorio que agentes del FAES aparecían por su barrio con frecuencia para intimidarlos.

El caso judicial, denuncia, estuvo "en punto muerto" por dos años, reactivándose solo tras un cambio de fiscal.

A.Weber--NZN