Pedro Sánchez se dice dispuesto a declarar en la causa contra su mujer, pero por escrito
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que debe declarar como testigo el próximo martes en la investigación contra su esposa Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias, dijo estar dispuesto a "colaborar" pero exigió hacerlo por escrito y no en persona, como pidió el juez.
El mandatario socialista, quien manifestó su voluntad de "colaborar" con la justicia, señaló no obstante en un escrito oficial enviado este miércoles al juez, al que tuvo acceso la AFP, que la ley establece que en tanto presidente del gobierno su "declaración se deberá presentar por escrito".
En su citación a Sánchez, conocida el lunes pasado, el juez Juan Carlos Peinado indicó que le tomaría declaración en su condición de esposo de la investigada y no como jefe del Ejecutivo, por lo cual lo interrogaría en persona, desplazándose el martes por la mañana hasta el palacio de la Moncloa, la sede del Gobierno.
"Es notorio que mi comparecencia resulta inescindible de la condición de Presidente del Gobierno", rebatió en su escrito Sánchez, quien estimó que el juez "compartirá la necesidad del máximo respeto a nuestro marco constitucional" y a "lo establecido por la ley (...) respecto a la institución del presidente del Gobierno".
Desde el comienzo de la investigación en abril, Sánchez ha defendido la inocencia de su esposa, Begoña Gómez.
La defensa de Gómez recurrió la decisión del juez de pedir declaración al jefe del Ejecutivo, al igual que lo hizo la Fiscalía, que cuestionó "la proporcionalidad" de ese paso teniendo en cuenta el "previsible impacto y repercusión" en la vida del país.
Gómez, especializada en la recaudación de fondos, sobre todo para fundaciones y oenegés, es sospechosa de haber aprovechado el cargo de su marido en sus relaciones profesionales, en particular con Juan Carlos Barrabés, un empresario español que obtuvo ayudas públicas y que también está investigado.
El juez Peinado abrió la causa ante la denuncia de un colectivo cercano a la extrema derecha, que admitió haberse basado solo en artículos de prensa. Una segunda asociación, Hazte oír, se sumó posteriormente a la causa.
Dos informes de la Guardia Civil no hallaron irregularidades y la Fiscalía ha pedido el archivo de la causa, a lo que se ha negado el juez Peinado, que ve elementos "suficientes" para mantenerla abierta.
Si se concreta su declaración, Sánchez será el segundo presidente del Gobierno español en activo en declarar como testigo ante un juez, después del conservador Mariano Rajoy, que lo hizo en un caso de corrupción de su Partido Popular.
E.Leuenberger--NZN