El papa saluda el "coraje" del fallecido rey Balduino, opuesto al aborto
El papa Francisco rindió homenaje este sábado al "coraje" del rey belga Balduino, fallecido en 1993 y quien se opuso a la ley que despenaliza el aborto, calificada por el pontífice como una "ley asesina".
Este sábado, después de un encuentro con representantes religiosos en Bruselas, el papa se dirigió a la cripta real belga para orar en privado ante la tumba del rey Balduino, que reinó desde 1951 hasta su muerte en 1993.
En presencia del rey belga, Felipe, y de la reina Matilde, Francisco elogió el "coraje" del soberano que decidió "dejar su cargo de rey para no firmar una ley asesina", señaló el Vaticano.
En 1990, opuesto a un proyecto de ley que despenalizaba el aborto, el rey Balduino se declaró "incapacitado de reinar" durante varios días, mientras el Parlamento aprobaba el texto.
El soberano belga aludió a sus convicciones católicas al explicar por qué no pondría su firma al texto, provocando una de las principales crisis políticas de su reinado.
El palacio real belga destacó que Felipe, sobrino de Balduino, y su esposa Matilde acompañaron al papa "por cortesía" durante esta "visita improvisada" y de "carácter estrictamente privado" a la cripta real, en una forma de distanciarse del gesto de Francisco.
La ley belga de 1990 sobre el aborto establece que "toda mujer embarazada en situación de angustia" tiene derecho a solicitar un aborto hasta las 12 semanas de embarazo.
Desde entonces, el Código Penal belga no ha sido modificado. Un proyecto de ley destinado a ampliar el plazo legal a 18 semanas ha provocado un acalorado debate en las últimas semanas.
El Centro de Acción Secular, una de las principales asociaciones belgas que defienden el laicismo, denunció este sábado los "sorprendentes comentarios" del papa, calificándolos de "provocación, en el mismo día del Día Internacional del Derecho al aborto".
Según el Vaticano, el papa Francisco también invitó a los belgas a seguir el ejemplo del rey Balduino y dijo esperar que la causa para su beatificación sea exitosa.
E.Schneyder--NZN