Nepal deberá liberar al asesino en serie alias "La Serpiente"
El asesino en serie francés Charles Sobhraj, quien cometió una serie de homicidios en los años 1970 en Asia y fue retratado en la serie de Netflix "La Serpiente", deberá ser liberado este jueves de una prisión de Nepal.
El máximo tribunal del país determinó el miércoles que Sobhraj, de 78 años, encarcelado desde 2003 por dos asesinatos, debe ser liberado anticipadamente por motivos de salud.
Autoridades carcelarias dijeron a AFP que, tras recibir los documentos judiciales relevantes, entregarán a Sobhraj a las autoridades migratorias.
La corte determinó que Sobhraj deberá ser deportado en un plazo de 15 días.
Sobhraj fue operado a corazón abierto en 2017 y su liberación está acorde con la ley que permite la excarcelación compasiva de presos gravemente enfermos que hayan cumplido tres cuartas partes de su condena.
El preso, un francés de origen vietnamita e indio, comenzó a viajar por el mundo a inicios de los años 1970 y llegó a la capital tailandesa de Bangkok.
Haciéndose pasar como comerciante de joyas, se hacía amigo de las víctimas, muchos de ellos mochileros occidentales, luego los drogaba, los robaba y mataba.
"Odiaba a los mochileros, los veía como drogadictos jóvenes y pobres", comentó a AFP la periodista australiana Julie Clarke, quien entrevistó a Sobhraj.
"Se consideraba a sí mismo un héroe criminal", agregó.
Suave y sofisticado, habría cometido su primer asesinato con una joven estadounidense cuyo cuerpo fue hallado en una playa en 1975.
Apodado el "asesino del bikini", llegó a estar vinculado a más de 20 homicidios.
Su otro apodo, "La Serpiente", vino de su habilidad de asumir otras identidades para evadir a la justicia, y se convirtió en el título de la exitosa serie de Netflix sobre su vida.
- Timador, seductor, ladrón -
Fue arrestado en India en 1976 y allí pasó 21 años encarcelado, con una breve salida en 1986 cuando escapó y fue capturado nuevamente en el estado costero de Goa.
Liberado en 1997, vivió en París donde cobraba por dar entrevistas, pero regresó a Nepal en 2003.
Fue visto en el distrito turístico de Katmandú y detenido en un casino.
Al año siguiente, un tribunal lo sentenció a cadena perpetua por el asesinato de la turista estadounidense Connie Jo Bronzich en 1975.
Una década después fue declarado culpable del asesinado de la pareja de Bronzich, una canadiense.
"Era culto y cortés", recordó el año pasado Nadine Gires, una francesa que vivió en el mismo edificio de apartamentos que Sobhraj.
"No solo era un timador, seductor y ladrón de turistas, también era un malvado asesino", comentó a AFP.
W.Vogt--NZN