Jordi Alba, el amo de la banda izquierda de la Roja
En el empate contra Alemania, Álvaro Morata centró los elogios con su gol, pero tras el tanto estaba la enésima asistencia milimetrada del veterano Jordi Alba, el amo absoluto de la banda izquierda en la selección española.
"Es el mejor lateral del mundo en el último cuarto del campo. Es rapidísimo, defiende bien y hace mucho con el balón", aseguró rotundo el seleccionador español Luis Enrique Martínez tras el encuentro disputado en el estadio de Al Bayt el domingo pasado.
Alba ha vuelto a convertirse en un imprescindible en el once de Luis Enrique, pese a que no tuvo el mejor inicio cuando el asturiano se hizo cargo de la selección tras su discreta actuación en el Mundial de Rusia-2018.
Luis Enrique dejó fuera al lateral del Barcelona en las dos primeras listas que realizó en septiembre y octubre de 2018, dando alas a las especulaciones sobre una supuesta animadversión personal de la época en que 'Lucho' fue entrenador del Barça.
"No me ha sucedido no llamar a un jugador por motivos personales, hasta ahora lo que he hecho es con motivos profesionales", aclaraba el seleccionador español al dar su segunda lista en octubre de 2018.
- 'El lateral con mejor pase' -
Luis Enrique acabó con todas las especulaciones en noviembre de 2018 cuando convocó al lateral barcelonista para el partido de Liga de Naciones contra Croacia (derrota 3-2) y el amistoso contra Bosnia (1-0).
Desde entonces, Alba ha recuperado su lugar en la Roja, de la que sólo le han apartado lesiones, hasta llegar al Mundial de Catar, donde ya se ha ilustrado con tres asistencias, una de ellas para servir a Álvaro Morata el gol contra Alemania (1-1) el domingo pasado.
"Alba es el lateral con mejor pase", asegura Luis Enrique, que ya pudo disfrutarlo en el Barcelona, donde el de L'Hospitalet de Llobregat formó una asociación letal con Leo Messi, a la hora de surtir de balones de gol al astro argentino.
"Lo que tenía con Messi era algo especial. Casi todos los goles que he marcado con el Barça han sido jugadas con él, con pases suyos. Y yo también le he dado muchos pases", señalaba Jordi Alba en una entrevista con el diario As.
Su aportación en ataque se suma a su buenas prestaciones defensivas como jugador rocoso y complicado de superar, que serán necesarias el martes contra Marruecos y el complicado extremo Hakim Ziyech.
El jugador de la Roja, campeón de Europa en 2012, disputa su tercer Mundial, tras las decepciones de Brasil-2014 y Rusia-2018, con ganas de llegar lejos en el atípico Mundial catarí.
- Guía para los jóvenes -
"Sueño con ganar el Mundial, con llevarnos la Copa. Es el torneo que me falta y hay selección para poder competir. Estoy muy confiado, hay muchísima unión y tenemos un gran grupo", afirmó el lateral izquierdo de la Roja en una entrevista con el diario Sport.
Un grupo en el que Jordi Alba, a sus 33 años, es uno de los veteranos, junto a su compañero Sergio Busquets, llamados a ser los mentores de un grupo que conforma la tercera selección más joven del Mundial.
Los veteranos "nos guían. Por ejemplo a mí Jordi Alba, que juega en mi posición y normalmente me aconseja. El primer día ya me dijo que en la selección los laterales se colocaban diferente y ya me lo explicó. Me da buenos consejos", señalaba el joven Alejandro Balde al diario Mundo Deportivo.
Con 90 partidos con la camiseta de la Roja y nueve goles anotados para España, Jordi Alba afrontará frente a Marruecos en octavos de final un nuevo reto para intentar llegar a su ansiado trofeo mundial.
Y.Keller--NZN