En las canchas de Liberia, el presidente Weah mantiene su cota de popularidad
Al acercarse a un terreno de fútbol completamente nuevo en Clara Town, un suburbio de Monrovia, Osman Fofana, de 17 años, no cree lo que ve: ¡Es asombroso!", dice el joven delante de sus amigos reunidos para un evento anual de su escuela.
"Los jóvenes rezamos para que George Weah sea reelegido", añade el adolescente. El antiguo astro del fútbol, nacido en este barrio de la capital liberiana y único Balón de Oro africano, es candidato el martes a un segundo mandato a la cabeza de este pequeño país anglófono del oeste del continente africano.
Presidente desde 2018, Weah ha contribuido a la construcción de parques recreativos en varias zonas desfavorecidas de la capital y ha prometido extender esta iniciativa a todo el país en caso de ser reelegido.
Un terreno de fútbol de césped artificial, una cancha de baloncesto y un parque de juegos para niños componen el complejo deportivo, que contrasta con el entorno de chabolas en calles inundadas por las lluvias de este mes de octubre.
"Antes, sólo jugábamos en asfalto o tierra. Weah es el primero en crear complejos deportivos de este estilo. A mi me gustaría ser un gran futbolista como él. Es un modelo para todos los liberianos", se entusiasma Wonder ZB Stewar, de 16 años, mientras calienta para jugar.
Por megafonía suena a fondo el 'afrobeat'. Unos niños juegan al baloncesto con un animador y un silbato suena para marcar el comienzo de un partido de fútbol. Algunos espectadores presencian el juego desde el borde del campo, al mismo tiempo que un desfile por un candidato local a las legislativas pasa por la nueva carretera construida en esta zona.
"Estos centros recreativos elevan la moral de los niños. Realmente están contentos de venir aquí", dice uno de sus monitores, Jordan David.
- Desarrollo del fútbol -
"Nos hemos beneficiado de la exoneración de los aranceles sobre todas las importaciones y esto ha abierto la vía a la construcción de tres terrenos artificiales" con la ayuda de la FIFA, explica Mustapha Raji, presidente de la Federación Liberiana de Fútbol.
"Además de estos proyectos de infraestructuras, hemos traído todos los equipamientos necesarios al desarrollo del fútbol: balones, equipamientos para los árbitros, uniformes para los equipos. Y el gobierno nos ha apoyado mucho", añade.
"Tenemos nuevas canchas, pero ahora tenemos que desarrollar el 'coaching' para tener mejores resultados", estima el exseleccionador nacional Kaetu Smith. Liberia ocupa actualmente el puesto 150 en el ranking FIFA y no se clasifica para la Copa de África de Naciones desde 2002, en la época en la que aún jugaba George Weah.
"Las nuevas canchas cambian muchas cosas en los entrenamientos. Muchas chicas se lanzan al fútbol femenino. Pero necesitamos más medios", subraya Famatta Dean, seleccionadora del equipo sub-20 femenino.
En Clara Town, el complejo deportivo no sólo se utiliza para el deporte. Este jueves por la tarde, David Harmon (41 años) y Amelia Queen Tarlue (29) aprovechan el buen tiempo para tomarse unas fotos junto a su hija pequeña. La madre se tumba en el césped con su pequeña en brazos, mientras que David dispara sin cesar con la cámara de fotos.
- "Los problemas siguen" -
"Antes, este espacio era un descampado que siempre estaba inundado. Ahora es magnífico", dice Harmon, aunque matiza que "los problemas siguen, porque los mosquitos nos invaden y necesitaríamos agua corriente y lavabos".
En el exterior del recinto, unos niños juegan al fútbol descalzos. Han colocado sus zapatos como postes de unas porterías improvisadas. Pese a las nuevas instalaciones, casi nunca juegan en el interior, como si ese espacio no les perteneciese.
Los gestores del estadio aseguran que la entrada es gratuita para los vecinos del barrio. Para el resto la entrada es de 50 dólares por lo que dura un partido de fútbol (a dividir por el número de jugadores), un precio inasumible en un país en el que más de una quinta parte de la población vive con menos de 2,15 dólares diarios, según datos del Banco Mundial.
En la carretera que lleva al estadio se ha instalado una estatua en honor del presidente Weah. Representan a tres personas que llevan en un pedestal al presidente, que levanta la mano.
Unos jóvenes están sentados en las vallas que protegen la obra. Uno de ellos, Victor B. Welleh, profesor de 27 años, asegura que "George Weah ha construido la carretera en el barrio, pero la corrupción ha aumentado, y la inseguridad también".
"Faltan escuelas y la mayoría de estudiantes se drogan", añade Welleh, decepcionado por las promesas incumplidas del presidente Weah.
T.L.Marti--NZN