Brasil, Emiratos Árabes y Azerbaiyán prometen nuevos compromisos más rigurosos contra las emisiones de CO2
Los próximos compromisos de descarbonización de los Emiratos Árabes Unidos, Azerbaiyán y Brasil estarán en línea con los requisitos para limitar el calentamiento global a 1,5° C, anunciaron el miércoles esos tres países.
Émiratos Árabes Unidos albergó en noviembre pasado la 28ª conferencia sobre el cambio climático (COP28), y Azerbaiyán es el encargado de organizar la próxima a finales de este año en Bakú.
Brasil albergará la COP30 el año que viene.
Estos tres países decidieron conformar una "troika" para coordinar sus esfuerzos de negociación.
El Acuerdo de París de 2015, que estableció este objetivo de 1,5°C, prevé que los planes de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero de cada país se formalicen cada cinco años en las "Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional" (NDC en inglés).
Un punto clave de las negociaciones climáticas, la tercera ola de NDC, destinada a establecer objetivos específicos para el horizonte 2035, debe concluir en la COP30 en Belém, a finales de 2025.
Esto implica que los países presenten sus compromisos antes de febrero de 2025.
Sin embargo, hasta ahora las cosas han avanzado poco, según varios observadores.
"Siendo tres países en desarrollo que representan diferentes regiones del mundo, las presidencias de la COP28, la COP29 y la COP30 demostrarán su compromiso al presentar NDC alineadas con 1,5° C", escribió el miércoles esta inédita "troika de presidencias".
Los compromisos actuales de los Emiratos, cuya inversión en hidrocarburos sigue aumentando, son considerados "altamente insuficientes" y los de Brasil "insuficientes" por los expertos del grupo no gubernamental Climate Action Tracker (CAT).
Anfitrión de la COP29 en noviembre, Azerbaiyán, que no fue evaluado por el CAT, publicó su nueva NDC en octubre: tiene como objetivo reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 35% para 2030 con respecto a 1990, y en un 40% para 2050.
El objetivo de este país, muy dependiente de sus hidrocarburos, sigue alejado de la neutralidad de carbono.
Su proporción de energía renovable ha permanecido estable (alrededor del 15 al 17%) de 2011 a 2022, según esta NDC.
Para mantenerse en el límite de 1,5° C, la nueva oleada de NDC "deberá incluir objetivos (...) que permitan reducir las emisiones en un 43% para 2030" respecto a 2019, y un 60% para 2035, recordó la troika.
Sin embargo, los compromisos actuales conducen a una reducción del 2% para 2030, según la ONU. Estos compromisos sitúan al planeta en una trayectoria de calentamiento de hasta +2,9° C para 2100, en comparación con al menos +1,2° C en la actualidad.
U.Ammann--NZN