El rublo circulará en la ciudad ucraniana ocupada de Jersón, dice un funcionario ruso
La administración rusa que controla la ciudad ucraniana de Jersón pretende introducir el rublo para reemplazar a la moneda ucraniana, la grivna, a partir del 1 de mayo, aseguró el jueves un responsable local ruso.
"A partir del 1 de mayo nos moveremos a la zona del rublo", declaró el responsable, Kirill Stremousov, citado por la agencia noticiosa estatal rusa RIA Novosti.
Indicó que habría un período de gracia de cuatro meses en el cual la grivna ucraniana podrá circular también.
"Posteriormente cambiaremos a un sistema de pagos en rublos", agregó Stremousov, según RIA Novosti.
Ningún alto responsable ruso confirmó inicialmente la medida.
La encargada para los Derechos Humanos del Parlamento ucraniano, Ludmila Denissova, condenó este anuncio.
"La introducción del rublo ruso en la región de Jersón es un acto de anexión y una violación grave por parte de Rusia" de la Carta de las Naciones Unidas, aseguró en Telegram.
Rusia anunció esta semana que había tomado control de toda la región sureña de Jersón, incluyendo su capital administrativa del mismo nombre, que cayó a manos de Moscú poco después de la invasión del 24 de febrero.
Kiev acusa a Rusia de querer organizar un referendo de independencia sesgado en esa región, así como en la región vecina de Zaporiyia.
Esto se hizo en Donbás en 2014, cuando los separatistas prorrusos, apoyados por Moscú, tomaron parcialmente el control. Los separatistas proclamaron entonces las "repúblicas populares" de Donetsk y Lugansk, cuya independencia fue reconocida por Moscú justo antes de invadir Ucrania el 24 de febrero.
"No habrá República Popular de Jersón. Si alguien quiere una nueva anexión, Rusia sufrirá sanciones más fuertes", declaró el 22 de abril el presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
El ministerio ruso de Defensa dijo que sus fuerzas estaban restaurando "la vida pacífica" en Jersón y otras regiones que fueron capturadas recientemente, pese a versiones en la prensa ucraniana y redes sociales sobre protestas contra la administración rusa.
Ningún periodista extranjero tiene acceso a esa ciudad, que contaba con cerca de 300.000 habitantes antes de la guerra.
O.Krasniqi--NZN