Zelenski acusa a Rusia de "aterrorizar" tras daños en central nuclear de Zaporiyia
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, acusó el sábado a Rusia de utilizar la central nuclear de Zaporiyia para "aterrorizar", luego de que el operador de la instalación informara de graves daños en el lugar.
Energoatom, operador de la central nuclear de Zaporiyia en el sur de Ucrania, dijo el sábado que partes de la infraestructura había sufrido "graves daños" tras ataques militares y uno de sus reactores fue apagado de manera forzada.
Los bombardeos del viernes dañaron una estación que contenía nitrógeno y oxígeno, así como a un "edificio auxiliar", anunció Energoatom en un mensaje en Telegram.
Las autoridades prorrusas en la región ocupada de Jersón reportaron otro intento de asesinato contra un alto funcionario, en momentos en que las tensiones se incrementan en el este y sur del país.
Y la responsable de Amnistía Internacional (AI) en Ucrania, Oksana Pokalchuk, anunció su renuncia tras la publicación de un controvertido informe de esta oenegé que acusa al ejército ucraniano de poner en peligro a civiles.
Kiev y Moscú se acusan mutuamente de los ataques en la planta de Zaporiyia, el complejo nuclear más grande de Europa que está bajo control ruso desde marzo.
Zelenski acusó el sábado por la noche, una vez más, a Moscú de terrorismo. "Terroristas rusos se convirtieron en los primeros en el mundo en usar una central (...) para aterrorizar", dijo en su discurso diario.
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, condenó el sábado el ataque que calificó de "una violación grave e irresponsable de las normas de seguridad nuclear y de un nuevo ejemplo del desprecio de Rusia por las normas internacionales".
De su lado, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) se mostró "alarmado". Los bombardeos representan un "riesgo muy real de un desastre nuclear", dijo Rafael Grossi, director de la agencia nuclear de la ONU.
- Otro intento de asesinato -
Un funcionario de las autoridades rusas de ocupación en Jersón resultó gravemente herido el sábado en un intento de asesinato, dijeron funcionarios locales prorrusos.
Vitaly Gur "se encuentra en el hospital con múltiples heridas de bala, en estado crítico", explicó un agente no identificado a la agencia pública rusa TASS.
Gur es el jefe adjunto del distrito de Kajovka, a unos 80 kilómetros al este de la ciudad de Jersón.
El ataque es el más reciente de una serie de atentados contra funcionarios en las regiones ucranianas controladas por Rusia.
Aunque Rusia se ha hecho con una amplia franja de la región de Jersón y parte de la cercana Zaporiyia en los últimos meses, las fuerzas ucranianas han recuperado parte de su territorio.
En su alocución del sábado, Zelenski arremetió contra AI comparando sus acusaciones contra el ejército ucraniano con su silencio ante las acciones de Rusia.
Sobre los ataques a la central nuclear de Zaporiyia, afirmó que aunque representan "uno de los crímenes más peligrosos contra los ucranianos y todos los europeos (...) por alguna razón, aún no hay un informe o siquiera un simple mensaje de Amnistía Internacional al respecto".
"Es un silencio muy elocuente, que señala, una vez más, una selectividad manipuladora de esta organización", agregó.
AI desató indignación en Ucrania con un informe publicado el jueves, que acusaba al ejército ucraniano de poner en peligro a civiles al establecer bases en escuelas y hospitales, y lanzar contraataques en áreas de alta densidad poblacional.
- Controvertido informe -
En protesta, Pokalchuk anunció su dimisión como jefa de la oficina de Amnistía en Ucrania.
"Si no se vive en un país invadido por ocupantes que lo desmembran, no se comprende probablemente lo que supone condenar a un ejército de defensores", dijo Pokalchuk en redes sociales el viernes por la noche.
"No hay palabras en ningún idioma que puedan transmitir esto a alguien que no ha experimentado este dolor".
Agregó que intentó convencer a la dirección de AI que el informe era sesgado y no tenía en cuenta el punto de vista del ministerio ucraniano de Defensa.
La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, lamentó su partida y elogió su trabajo. Pero la organización se mantiene firme con su controvertido informe.
El viernes, funcionarios ucranianos dijeron que tres buques cargados de grano zarparon de Ucrania después de que el primero en meses lo hiciera el lunes, como parte de un acuerdo para aliviar la crisis alimentaria mundial.
Otros cinco cargueros tienen previsto zarpar de los puertos ucranianos de Chernomorsk y Odesa el domingo, según el Centro de Coordinación Conjunta (CCC), que supervisa las operaciones.
La CCC se establece en Estambul bajo los términos del acuerdo internacional firmado el 22 de julio entre Rusia, Ucrania, Turquía y la ONU.
F.E.Ackermann--NZN