Primer ministro israelí se reúne con el rey y la comunidad judía de Baréin
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, se reunió el martes con el rey de Baréin, así como con representantes de la comunidad judía de esta monarquía del Golfo, con motivo de la primera visita de un jefe de gobierno israelí a ese país.
Baréin y los Emiratos Árabes Unidos fueron las primeras monarquías árabes del Golfo en normalizar sus relaciones con Israel en septiembre de 2020, reforzando la integración del Estado hebreo en una región donde Irán es percibido como una amenaza.
Bennett, que llego el lunes por la noche a Baréin, se entrevistó el martes con el príncipe heredero y primer ministro Salman Bin Hamad Al Khalifa, y luego con el rey Hamad Bin Issa Al Khalifa.
Este último destacó la importancia de "reforzar la asociación Baréin-Israel a la luz de la firma de los acuerdos" de normalización, según la agencia oficial bareiní BNA.
Bennett también se reunió con varios funcionarios bareiníes, entre ellos los ministros de Defensa y de Transportes, para "profundizar" la cooperación bilateral.
"Queremos alimentar esta relación en los ámbitos de la energía, la economía, el turismo y la arquitectura regional", afirmó Naftali Bennett, según su oficina.
- Flota estadounidense -
Poco antes, el líder israelí se entrevistó con el vicealmirante Brad Cooper de la 5ª flota estadounidense, con base en Baréin y encargado de las operaciones navales en Medio Oriente.
Es "un elemento importante para el mantenimiento de la estabilidad regional" frente a las diversas amenazas a la seguridad, destacó Bennett, quien espera que la cooperación entre los países de la región y el poderoso aliado estadounidense continúe desarrollándose.
Para Yoel Guzansky, investigador del instituto de estudios de Seguridad Nacional de Tel Aviv, el viaje de Bennett concierne "absolutamente" a Irán, enemigo número uno de Israel.
Declaraciones respaldadas por Dore Gold, responsable del centro de Asuntos Públicos de Jerusalén, para quienes Israel y Bahrein han sido empujados hacia vínculos más estrechos, ya que ambos están "amenazados por las acciones iraníes".
Bennett se reunió también con dirigentes de la comunidad judía de Baréin. "Estoy seguro de que ustedes pueden ser un puente importante entre Baréin e Israel", afirmó Bennett ante Eitan Naeh, embajador de Israel, e Ibrahim Nonoo, jefe de la comunidad judía local.
Los judíos de Baréin disfrutan de una posición política y económica relativamente privilegiada, pero los fieles deben practicar sus rituales religiosos en sus domicilios desde la destrucción de la sinagoga de Manama al principio de conflicto israelo-árabe en 1947.
En agosto de 2021, por primera vez desde hace 74 años, un rezo público del sabat, día de reposo semanal de los judíos, se celebró en esta sinagoga, que fue reconstruida.
"Los acuerdos (de normalización) lo han cambiado todo", se congratuló entonces a la AFP Ibrahim Nonoo, jefe de la comunidad judía local.
La reciente normalización de las relaciones entre Israel y países árabes ha sido criticada por los palestinos para quienes semejante acercamiento con Israel no puede producirse sin un acuerdo de paz israelo-palestino.
Esta normalización, que se extiende de Sudán a Marruecos, fue realizada bajo el gobierno de Benjamin Netanyahu, que no visitó oficialmente Baréin o los Emiratos. Bennet, en el poder desde junio, visitó Emiratos en diciembre.
"Es importante, en especial en estos tiempos tumultuosos, que desde esta región enviemos un mensaje de buena voluntad, de cooperación, de unidad ante desafíos comunes", declaró el lunes el primer ministro, sin nombrar a Irán, enemigo jurado de Israel.
Teherán sigue siendo también el mayor enemigo de Baréin, que lo acusa de fomentar las manifestaciones contra el gobierno. En 2011, el pequeño reino, habitado hoy por 1,5 millones de personas, fue escenario de un levantamiento popular esencialmente liderado por la comunidad chiita.
I.Widmer--NZN