Zürcher Nachrichten - Ruanda afirma que acuerdo desechado para expulsar migrantes de Reino Unido no contempla devolución de fondos

"El acuerdo que firmamos no estipula que tengamos que devolver el dinero. Para ser claros, devolver el dinero nunca fue parte del trato", afirmó el portavoz del gobierno, Alain Mukuralinda.

El flamante primer ministro británico, Keir Starmer, confirmó el sábado su intención de abandonar el plan del anterior gobierno conservador de expulsar del Reino Unido a migrantes y solicitantes de asilo que entraran de forma irregular para enviarlos a Ruanda.ffvv

El proyecto "estaba muerto y enterrado incluso antes de empezar. Nunca fue disuasorio. No estoy dispuesto a continuar con medidas engañosas", dijo Starmer tras el primer consejo de ministros del nuevo gobierno el fin de semana.

Londres ya ha pagado a Ruanda 240 millones de libras [unos 303 millones de euros, 307 millones de dólares] desde que el ex primer ministro Boris Johnson anunció por primera vez el plan en abril de 2022.

El polémico proyecto se enfrentó a varios obstáculos legales y el Tribunal Supremo del Reino Unido dictaminó en noviembre que era ilegal en virtud del derecho internacional.

A principios de este año, el gobierno del anterior primer ministro, Rishi Sunak, impulsó una ley en el parlamento para declarar que Ruanda es un país seguro y despejar un obstáculo para las expulsiones, pese a los cuestionamientos sobre el respeto a los derechos humanos en el país africano.

Ruanda, un pequeño país de África oriental con 13 millones de habitantes, presume de ser uno de los países más estables del continente y ha recibido elogios por sus modernas infraestructuras.

Pero, grupos de defensa de los derechos acusan al veterano presidente Paul Kagame, que gobierna desde hace décadas, de reprimir la disidencia y la libertad de expresión.

- "Una cláusula de salida" -

Mukuralinda recordó que el Reino Unido se había puesto en contacto con Ruanda y solicitó una asociación que fue "ampliamente discutida".

"El acuerdo fue a los tribunales, e incluso se modificó tras los resultados de los tribunales", argumentó.

"Fue al parlamento y finalmente se convirtió en un tratado entre dos países. Un tratado prevé una cláusula de salida", subrayó.

La inmigración se ha convertido en una cuestión política importante en el Reino Unido desde su salida de la Unión Europea (UE) en 2020, un plan presentado como una oportunidad para "retomar el control" de las fronteras.

Starmer defiende abordar el tema de la inmigración y las llegadas de personas que cruzan de forma irregular el canal de la Mancha desde Francia, actuando "desde arriba", desarticulando las bandas de traficantes de personas.

Tras el anuncio del gobierno británico, tres solicitantes de asilo que habían recurrido a los tribunales para frenar su expulsión a Ruanda, lograron que sus casos quedaran archivados.

Las solicitudes "serán examinadas de manera coherente con la nueva política de asilo del nuevo gobierno", afirmó el abogado del Ministerio del Interior del nuevo gobierno laborista, James Eadie.

W.Vogt--NZN