El viaje a París de una polizona rusa termina en un tribunal de Nueva York
El viaje a París sin billete ni tarjeta de embarque de la rusa Svetlana Dali, residente en Estados Unidos, terminó este jueves en un tribunal tras una rocambolesca aventura que ha puesto en aprietos a la seguridad del aeropuerto John F. Kennedy, de Nueva York.
Este jueves Dali, de 57 años, compareció en el Tribunal Federal Este de Brooklyn, donde un juez dictó una orden temporal de detención de 24 horas mientras se verifica su residencia y se negocia una fianza.
Dali se embarcó el pasado 26 de noviembre en un vuelo de la compañía estadounidense Delta Airlines sin billete ni tarjeta de embarque con destino al aeropuerto parisino de Charles de Gaulle.
Fue rechazada una primera vez en el control de pasaportes al carecer de ese documento imprescindible de viaje, pero después probó suerte por la puerta destinada a las tripulaciones y franqueó los controles camuflada entre un equipo de la compañía española Air Europa, según un documento judicial, elaborado por Ian S. Crystal, agente del FBI (la policía de investigación).
Después de superar otro control más de la Administración de Seguridad en el Transporte, entró en el avión que aseguraba el vuelo DL264 de Delta sin que nadie le pidiera la tarjeta de embarque, según dicho documento.
La tripulación se dio cuenta de su presencia cuando el avión volaba sobre el Atlántico. Avisada, la policía francesa la esperaba en París y le impidió entrar en el país.
"No fue admitida en territorio francés por carecer de un documento válido de viaje (visado) y fue colocada en la zona de espera durante el tiempo necesario para su devolución a Estados Unidos, ya que es titular de un permiso de residencia estadounidense válido", según un comunicado del ministerio del Interior francés, citado por la prensa local.
En París solicitó asilo, pero las autoridades francesas se lo denegaron, según The New York Daily News, que asegura que esta era la segunda vez que lo intentaba.
Tras varios días en el área internacional del aeropuerto parisino, Dali regresó finalmente a Nueva York el 4 de diciembre con la misma compañía con la que voló a París.
Fue recibida por la policía, a la que confesó que había viajado intencionadamente sin billete eludiendo los controles de seguridad y de la tripulación de Delta. Si es declarada culpable, su aventura le puede costar 5 años de cárcel.
W.Vogt--NZN