Zürcher Nachrichten - El trauma perdura para los supervivientes del sismo en Turquía

EUR -
AED 3.819451
AFN 72.930872
ALL 98.409735
AMD 411.854041
ANG 1.871113
AOA 948.369492
ARS 1066.553725
AUD 1.664339
AWG 1.871783
AZN 1.77144
BAM 1.953413
BBD 2.096238
BDT 124.068378
BGN 1.95598
BHD 0.392264
BIF 3070.048132
BMD 1.039879
BND 1.410776
BOB 7.174232
BRL 7.00655
BSD 1.038231
BTN 88.374998
BWP 14.419378
BYN 3.397648
BYR 20381.63186
BZD 2.089147
CAD 1.492903
CDF 2984.453519
CHF 0.935522
CLF 0.037283
CLP 1028.741995
CNY 7.589975
CNH 7.597581
COP 4588.789229
CRC 527.155769
CUC 1.039879
CUP 27.556798
CVE 110.130411
CZK 25.14584
DJF 184.807541
DKK 7.460406
DOP 63.242712
DZD 140.622878
EGP 52.924961
ERN 15.598188
ETB 132.19145
FJD 2.411116
FKP 0.823566
GBP 0.828989
GEL 2.921965
GGP 0.823566
GHS 15.261349
GIP 0.823566
GMD 74.871252
GNF 8973.034166
GTQ 7.997227
GYD 217.214545
HKD 8.077464
HNL 26.378763
HRK 7.458956
HTG 135.754097
HUF 410.679663
IDR 16840.583294
ILS 3.795803
IMP 0.823566
INR 88.613876
IQD 1360.037915
IRR 43765.917235
ISK 145.094642
JEP 0.823566
JMD 161.762312
JOD 0.737588
JPY 163.600003
KES 134.18592
KGS 90.469239
KHR 4172.90035
KMF 484.713724
KPW 935.890677
KRW 1521.499712
KWD 0.32047
KYD 0.865243
KZT 537.852697
LAK 22705.252193
LBP 92972.479485
LKR 305.986058
LRD 188.959075
LSL 19.305008
LTL 3.070493
LVL 0.629012
LYD 5.096771
MAD 10.469905
MDL 19.15559
MGA 4897.015418
MKD 61.536195
MMK 3377.487002
MNT 3533.509307
MOP 8.30565
MRU 41.44535
MUR 48.946988
MVR 16.013038
MWK 1800.299876
MXN 20.991781
MYR 4.643578
MZN 66.452157
NAD 19.305008
NGN 1602.619851
NIO 38.203312
NOK 11.807693
NPR 141.400197
NZD 1.842075
OMR 0.400395
PAB 1.038231
PEN 3.866075
PGK 4.21385
PHP 60.405512
PKR 289.040068
PLN 4.259874
PYG 8097.104629
QAR 3.775985
RON 4.974769
RSD 117.013786
RUB 103.974418
RWF 1448.330014
SAR 3.90412
SBD 8.717884
SCR 14.825582
SDG 625.481952
SEK 11.522256
SGD 1.412962
SHP 0.823566
SLE 23.711993
SLL 21805.749542
SOS 593.374844
SRD 36.456046
STD 21523.399447
SVC 9.084897
SYP 2612.72788
SZL 19.313397
THB 35.574372
TJS 11.358119
TMT 3.649976
TND 3.310454
TOP 2.435502
TRY 36.592443
TTD 7.055378
TWD 34.052718
TZS 2517.114881
UAH 43.532599
UGX 3800.355632
USD 1.039879
UYU 46.213523
UZS 13403.619603
VES 53.632376
VND 26449.326855
VUV 123.456538
WST 2.872965
XAF 655.156342
XAG 0.035142
XAU 0.000397
XCD 2.810325
XDR 0.796027
XOF 655.156342
XPF 119.331742
YER 260.35977
ZAR 19.402513
ZMK 9360.162731
ZMW 28.732886
ZWL 334.840671
El trauma perdura para los supervivientes del sismo en Turquía
El trauma perdura para los supervivientes del sismo en Turquía / Foto: OZAN KOSE - AFP

El trauma perdura para los supervivientes del sismo en Turquía

Algunos apenas duermen o temen los espacios interiores. Otros han desarrollado un intenso miedo a las montañas que antes les proporcionaban consuelo y bienestar.

Tamaño del texto:

En el sur de Turquía, a los pies del acantilado que domina Antakya, la angustia y el malestar atormentan todavía a los supervivientes del terremoto que provocó al menos 50.000 muertos en febrero.

Este sentimiento de angustia no los abandona desde la noche del 6 de febrero, en la que perdieron todo: casa, familia y, en muchos casos, el empleo.

Cuma Zobi conoce bien esta sensación. Este agente de seguridad de 38 años se despertó a causa de las enormes rocas que se preocipitaron sobre su casa.

La pequeña construcción de ladrillo ofrece ahora un enorme agujero a modo de puerta.

Su vehículo quedó sepultado por las piedras y tres de sus hijos, ensangrentados, tuvieron que salir a rastras de su habitación tras el temblor, ocurrido antes del amanecer.

Rocas de mayor tamaño se desprendieron después por el efecto de la lluvia o de las múltiples réplicas de la sacudida inicial.

"Nadie se atreve a entrar a una casa", explica Zobi frente a la suya, destrozada. "Incluso si duermes en una tienda, vuelves a pensar en ello, le das vueltas, hasta en sueños. Será difícil librarse de este miedo", afirma.

- "Estrés agudo" -

El psiquiatra Eralp Turk intenta curar esos traumas recorriendo voluntariamente la zona siniestrada, con un botiquín de medicamentos y una libreta en la que anota las angustias de sus pacientes.

Es uno de los miles de voluntarios que acudieron a Antakya, la antigua Antioquía, golpeada como ninguna otra ciudad por la peor catástrofe ocurrida en la Turquía moderna.

El treintañero visita a una quincena de personas cada día, a partir de una lista suministrada por los servicios sociales de la provincia.

Algunos damnificados se sienten inhibidos de abrirse ante un desconocido.

"Yo no insisto. Sólo propongo", dice Eralp Turk al volante de su coche.

"Los síntomas más habituales son el estrés agudo, la tristeza y la reactivación de antiguos problemas psiquiátricos", explica.

"Pero cada catástrofe es distinta. Cada región y sus habitantes tienen sus especifidades. La cultura y las tradiciones desempeñan también un papel", agrega.

- "Irascibles o agresivos" -

La montaña que Nuriye Dagli adoraba se ha convertido en una fuente de estrés desde que el desprendimiento de sus rocas casi le cuesta la vida.

"Fuimos una familia afortunada", explica la mujer de 67 años en de las tiendas donde vive ahora la mayoría de habitantes de la región.

"Nos sentábamos al pie de la montaña, los niños jugaban", lamenta. "Incluso cuando estaba sola, no tenía miedo".

Pero eso quedó atrás. "Un psiquiatra vino una vez. Creo que ayudó", matiza la mujer, sin demasiada convicción.

Aysen Yilmaz, un trabajador social, serpentea también entre los poblados de tiendas que se han levantado en la región.

Su conclusión es amarga: todas las personas que le han consultado presentan los síntomas propios de un estado de estrés postraumático.

"Algunos dicen tener problemas de sueño o de apetito, otros se volvieron muy irascibles o agresivos", explica. "Todos estos síntomas son problemas de estrés postraumático".

Sevgi Dagli canaliza toda su energía ocupándose de su bebé, nacido 15 días antes de la catástrofe.

La joven madre, de 22 años, dice que no puede compartir sus emociones. "Me lo guardo todo para mí", dice mirando a su pequeño.

Ahora piensa en marcharse de la zona, porque "cuantos más escombros se retiran, más polvoriento se vuelve el aire".

"Supongo que no es bueno para la salud", dice tras un silencio. "Me parece que en realidad ya no sabemos ni lo que hacemos".

O.Krasniqi--NZN