Zürcher Nachrichten - Argentina y sus trenes, la dificultad de volver a encarrilarse

EUR -
AED 4.104397
AFN 76.945413
ALL 99.231189
AMD 432.617988
ANG 2.010719
AOA 1036.724537
ARS 1075.538681
AUD 1.641361
AWG 2.011389
AZN 1.904081
BAM 1.955429
BBD 2.252673
BDT 133.324726
BGN 1.955529
BHD 0.42042
BIF 3234.286875
BMD 1.117438
BND 1.441627
BOB 7.709539
BRL 6.055052
BSD 1.115688
BTN 93.249023
BWP 14.748204
BYN 3.651208
BYR 21901.788071
BZD 2.248874
CAD 1.517202
CDF 3208.165381
CHF 0.949812
CLF 0.037689
CLP 1039.944272
CNY 7.880067
CNH 7.870123
COP 4641.820049
CRC 578.89026
CUC 1.117438
CUP 29.612111
CVE 110.244101
CZK 25.088056
DJF 198.672338
DKK 7.466279
DOP 66.967305
DZD 147.657009
EGP 54.142736
ERN 16.761573
ETB 129.466357
FJD 2.459262
FKP 0.850995
GBP 0.83876
GEL 3.051043
GGP 0.850995
GHS 17.539675
GIP 0.850995
GMD 76.548818
GNF 9639.172699
GTQ 8.624365
GYD 233.395755
HKD 8.704949
HNL 27.675753
HRK 7.597474
HTG 147.212093
HUF 393.517458
IDR 16941.25656
ILS 4.221139
IMP 0.850995
INR 93.284241
IQD 1461.522939
IRR 47035.770303
ISK 152.262556
JEP 0.850995
JMD 175.286771
JOD 0.791709
JPY 160.803866
KES 143.922717
KGS 94.13132
KHR 4531.14103
KMF 493.181764
KPW 1005.693717
KRW 1488.975611
KWD 0.340897
KYD 0.929724
KZT 534.908597
LAK 24636.329683
LBP 99909.860054
LKR 340.395471
LRD 223.1377
LSL 19.586187
LTL 3.299505
LVL 0.675928
LYD 5.297996
MAD 10.818149
MDL 19.468309
MGA 5046.04342
MKD 61.603322
MMK 3629.395577
MNT 3797.054841
MOP 8.955702
MRU 44.337595
MUR 51.268486
MVR 17.164273
MWK 1934.433289
MXN 21.697078
MYR 4.698871
MZN 71.348848
NAD 19.586187
NGN 1831.984424
NIO 41.062216
NOK 11.713438
NPR 149.198716
NZD 1.791484
OMR 0.429669
PAB 1.115688
PEN 4.181807
PGK 4.367172
PHP 62.188829
PKR 309.994034
PLN 4.274593
PYG 8704.349913
QAR 4.067529
RON 4.972492
RSD 117.203662
RUB 103.380402
RWF 1504.014883
SAR 4.193134
SBD 9.282489
SCR 14.578236
SDG 672.143165
SEK 11.364797
SGD 1.442952
SHP 0.850995
SLE 25.530448
SLL 23432.113894
SOS 637.579134
SRD 33.752262
STD 23128.713955
SVC 9.762149
SYP 2807.596846
SZL 19.593286
THB 36.793929
TJS 11.859752
TMT 3.911034
TND 3.380559
TOP 2.617156
TRY 38.132438
TTD 7.588561
TWD 35.736832
TZS 3045.822602
UAH 46.114158
UGX 4133.216465
USD 1.117438
UYU 46.101261
UZS 14197.308611
VEF 4047978.463464
VES 41.096875
VND 27494.566096
VUV 132.664504
WST 3.125992
XAF 655.832674
XAG 0.035881
XAU 0.000426
XCD 3.019933
XDR 0.826843
XOF 655.832674
XPF 119.331742
YER 279.722751
ZAR 19.426272
ZMK 10058.288435
ZMW 29.537401
ZWL 359.814634
Argentina y sus trenes, la dificultad de volver a encarrilarse
Argentina y sus trenes, la dificultad de volver a encarrilarse / Foto: Luis ROBAYO - AFP

Argentina y sus trenes, la dificultad de volver a encarrilarse

Conquistaron la inmensidad del país y lo construyeron como nación. Por mucho tiempo caídos en desgracia, los trenes están de regreso en Argentina, estación tras estación, aunque es dudoso si este incipiente regreso tiene un futuro viable.

Tamaño del texto:

El sol del amanecer enceguece a lo lejos sobre el Río de la Plata. La locomotora CNR CKD8 diesel-eléctrica abandona poco a poco los campos y avanza hacia Buenos Aires. Aún somnolientos, tras unas horas de viaje, los pasajeros se manifiestan felices de que los "trenes vuelvan".

Desde San Pedro, 170 km al norte de Buenos Aires, viajan a la capital por negocios, por un examen médico, para ver un pariente. No van rápido (3 horas y 20 minutos) pero el viaje es barato (1.130 pesos/5,10 dólares al cambio del día) y esa misma noche, estarán de vuelta.

"Antes, había trenes pero salían cada tanto. Este sale todos los días y esto me cambió bastante la vida", sonríe Noemí Peralta, 52 años, quien viaja a Buenos Aires (a 280 km) para comprar ropa al por mayor que luego venderá en mercados de la ciudad de Rosario (Santa Fe, este).

"Con el viaje en micro (autobús) a 5.000 pesos (22,6 dólares), la ganancia se me iba o tenía que vender las cosas más caras. Ahora, voy contenta porque llevo un montón de cosas", dice.

Justo Daract, Gobernador Castro, La Picada... Después de haber recuperado las concesiones de manos privadas, hace una década, el gobierno de centro-izquierda de Alberto Fernández va reinaugurando estaciones, algunas pequeñas, y habilitando ramales abandonados desde hacía 20 años o más.

- Nacidos juntos -

"Volvimos a conectar a 66 localidades con nuestros trenes de carga y pasajeros; intervenimos 2.500 kilómetros de vías y reactivamos 17 ramales ferroviarios", lanzó Fernández en un discurso en marzo. El gobierno de su predecesor, Mauricio Macri, (derecha liberal) había cerrado 12 ramales, enfatizó entonces su ministro de Transporte.

El ferrocarril tiene un lugar destacado en la historia y en el corazón de los argentinos. Nacieron prácticamente juntos.

"A diferencia de Europa, en América no había nada antes del ferrocarril. Fue un instrumento que tuvo el Estado para desarrollar o crear un país que no existía", sostiene el historiador Jorge Waddell, profesor de políticas públicas e historia ferroviaria argentina.

Testimonio de ese rico pasado son el museo ferroviario de Buenos Aires y las majestuosas terminales de Constitución (1887) y Retiro (1915), donde se mezclan bellas artes e influencias victorianas: los ingleses gerenciaron el inicio de los ferrocarriles.

Eran tiempos en que en este país de inmigración que se proyectaba como "granero del mundo" por su producción de cereales y ganado, se multiplicaban vías ferroviarias privadas hasta el absurdo de conformar una red con vías paralelas a pocos kilómetros unas de las otras.

Pero de 45.000 km de vías existentes en 1945, su máximo histórico, sólo quedan unos 15.000 km, de los cuales 5.000 km solo para transporte de pasajeros, en un país cinco veces más extenso que Francia -que cuenta con 27.000 km de vías-.

- ¿Un rol social? -

Nacionalizados en 1948 bajo el primer gobierno de Juan Domingo Perón (1946-1955), la extensa red ferroviaria argentina fue sufriendo la falta de inversiones hasta que en la década de 1990 fue en gran parte desmantelada durante la presidencia neoliberal de Carlos Menem (1989-1999).

"El ferrocarril era un enfermo que estaba conectado a un pulmotor desde hacía muchos años y se sacó el enchufe", explica Waddell sobre la política de los 1990.

Wadell tampoco confía en la viabilidad del ferrocarril en la actualidad: "Con una sociedad empobrecida no se pueden pagar las tarifas. Entonces prácticamente el 95% es subsidio estatal y el pasajero paga 5% del costo, encima en un Estado quebrado", explica.

Trenes Argentinos, la entidad pública que en 2014 retomó la gestión de la red --aunque subsisten concesiones privada en trenes de carga-- reconoce que las cifras no acompañan, pero considera su recuperación una "política de Estado".

"Pensamos la gestión en términos de rentabilidad social, no de rentabilidad económica", dice el presidente de la entidad, Mariano Marinucci. "El tren representa un derecho social para los ciudadanos y un servicio para las comunidades", acota.

En el tren albiceleste de Trenes Argentinos que une San Pedro con Buenos Aires, los pasajeros disfrutan de vagones amplios (comprados a China en 2014), con aire acondicionado, un vagón-restaurante, y agua caliente gratis en cada coche para la tradicional e indispensable infusión, el mate.

Eduardo Llama, un jubilado de 68 años "vuelto al tren" hace tres o cuatro años, se regocija pero lamenta que los trayectos "son más lentos que hace 50 años", debido entre otras causas al estado vetusto de algunas vías y a los pasos a nivel.

Sin embargo, la gente sigue queriendo al tren, barato y seguro, porque evoca recuerdos de infancia y periplos familiares.

Según Waddell, "los países fracasados como la Argentina añoran al pasado porque el único punto de referencia bueno que tienen está en el pasado. Y el tren es esencial en nuestro pasado".

R.Bernasconi--NZN