En Latakia, las villas y el tráfico del clan Al Asad indignan a los sirios
Un camino serpentea la entrada a una villa con vista al mar, entre el césped bien cuidado bordeado de lavanda y una piscina de azulejos. La residencia veraniega del derrocado presidente sirio, Bashar al Asad, en Latakia, el principal puerto sirio en el Mediterráneo, indigna a los visitantes.